Todas las diócesis, parroquias y comunidades del mundo están invitadas a celebrar la II Jornada Mundial de los Abuelos y las Personas Mayores el próximo domingo 24 de julio. Así lo informa un comunicado de prensa.
La Jornada, instituida por el papa Francisco como lo anunció después del Ángelus del 31 de enero de 2021, se celebra el cuarto domingo de julio, cerca de la fiesta de san Joaquín y santa Ana, los abuelos de Jesús, el 26 de julio. «Es importante que los abuelos se encuentren con sus nietos y que los nietos se encuentren con sus abuelos, porque –como dice el profeta Joel- los abuelos soñarán frente a sus nietos, tendrán ilusiones [grandes deseos], y los jóvenes, tomando fuerzas de sus abuelos, irán adelante, profetizarán», explicaba el Papa.
La nota puntualiza que todas las diócesis son animadas a efectuar una liturgia dedicada a los ancianos y recuerda que hay dos formas principales para participar en la Jornada, sugeridas por el Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida: celebrar una eucaristía o visitar a los ancianos que están solos.
Recursos en línea
Se recuerda que el Dicasterio facilita una serie de materiales y sugerencias pastorales y litúrgicas que están disponibles en su sitio web (entre ellas, se precisa que destacan la de visitar o acompañar a los ancianos solos). En efecto, hay un kit pastoral con videos, infografías, orientaciones y textos que pueden ayudar en la organización de iniciativas.
Indulgencia plenaria
La Penitenciaría Apostólica, acogiendo la solicitud presentada por el Cardenal Kevin Joseph Farrell, Prefecto del Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida, con motivo de la II Jornada Mundial de los Abuelos y de los Mayores, comunicó, el 30 de mayo, la facultad de obtener la indulgencia plenaria en las condiciones habituales: confesión sacramental, comunión eucarística y oración según las intenciones del Sumo Pontífice. La podrán recibir los abuelos, los ancianos y los fieles que participen en la misa del 24 de julio en la Basílica de San Pedro o en las diversas celebraciones que tendrán lugar en todo el mundo. La indulgencia podrá aplicarse también como sufragio a las almas del purgatorio.
La Indulgencia Plenaria, precisa la nota de aquel momento, se concede también el mismo día a los fieles «que dedicaran un tiempo adecuado a visitar, de forma presencial o virtual, a través de los medios de comunicación, a los hermanos ancianos en situación de necesidad o dificultad (como los enfermos, los abandonados, los discapacitados)».
Además, se concederá la misma Indulgencia Plenaria a los ancianos enfermos y a todos aquellos que, «imposibilitados de salir de su casa por un motivo grave, se unan espiritualmente a las sagradas celebraciones de la Jornada Mundial, ofreciendo a Dios Misericordioso sus oraciones, dolores y sufrimientos de la propia vida, especialmente mientras se difunden por los medios de comunicación las palabras del Pontífice y las diversas celebraciones».
La nota finaliza con una petición a los sacerdotes «para que se pongan a disposición con un espíritu dispuesto y generoso para la celebración del Sacramento de la Penitencia».
Carta del Cardenal De Donatis
El comunicado retoma la misiva que el Cardenal Vicario Angelo De Donatis envió a los párrocos y a los ancianos de Roma, en la que afirmaba: «En verano se interrumpen muchas actividades, pero muchas personas mayores no se van de vacaciones. Se quedan en la ciudad, en nuestros barrios y a veces se sienten aún más abandonados. Por lo tanto, sería bonito, con motivo de este día, pensar en un momento sencillo y significativo para los ancianos».
En su texto, el Cardenal De Donatis comenta que varias parroquias propusieron, el año pasado, una misa vespertina al aire libre (el sábado o el domingo), con la bendición de los ancianos seguida de una animación musical y la distribución de la cena. Este año, el Purpurado insta a visitar a los ancianos en sus hogares o casas de reposo.
Misa presidida por De Donatis en San Pedro, 24 de julio, 10:00 AM
Por último, el mensaje divulgado el 14 de julio informa que, este año, el día de la segunda Jornada, el Papa inicia su viaje apostólico a Canadá, durante el que tiene previsto visitar el Santuario de Santa Ana y reunirse con jóvenes y ancianos en una escuela primaria de Iqaluit. «El cuidado de los ancianos y su diálogo con las nuevas generaciones es una preocupación constante del Santo Padre, que ha dedicado buena parte de las audiencias de los miércoles de este año a una catequesis sobre la vejez. Además, la intención de oración que Francisco confía a toda la Iglesia a través de la Red Mundial de Oración del Papa para este mes de julio es precisamente por los ancianos», concluye el comunicado.
Crédito de la nota: Vatican News.