Sudán está al borde del abismo. De un conflicto de baja intensidad, se está convirtiendo rápidamente en una guerra abierta. Tras la enésima tregua acordada y no respetada, se han sucedido bombardeos y enfrentamientos que afectaron principalmente a la capital Jartum y a la región de Darfur, pero que se van extendiendo semana a semana, afectando a otras zonas del país.