En el contexto del próximo viaje del Papa en septiembre, a Indonesia, Papúa Nueva Guinea, Timor Oriental y Singapur, el presidente de la Federación de las Conferencias Episcopales de Asia, cardenal Charles Maung Bo, ofrece una mirada de la importancia de la visita: «El Santo Padre podrá tocar la diversidad dinámica de las Iglesias asiáticas y la fe firme de sus pueblos». El tema del cuidado de la creación es importante: «Los efectos del cambio climático son devastadores en Asia».
En una amplia entrevista concedida a los medios de comunicación vaticanos, el cardenal Charles Maung Bo, arzobispo de Yangón, Myanmar, y presidente de la Federación de las Conferencias Episcopales de Asia (FABC), traza un retrato de los fieles de Asia y Oceanía que el papa Francisco encontrará durante su viaje apostólico a Indonesia, Papúa Nueva Guinea, Timor Oriental y Singapur.
El viaje está programado del 2 al 13 de septiembre y marca el 45º viaje apostólico internacional papal, uno de los muchos a Asia durante su pontificado.
El cardenal Bo habla de una Iglesia vibrante y diversa que, a pesar de los desafíos políticos, económicos, sociales, medioambientales y culturales y del hecho de que «no siempre es fácil vivir la fe cristiana en algunas partes de Asia, continúa no sólo viva, sino también dinámica de diferentes maneras».
–El papa Francisco está a punto de realizar su 45º viaje apostólico, en este caso a Asia y Oceanía, ¿cómo valora la importancia de esta visita?
–Muchos pueblos en Asia sólo oyen hablar del Papa y lo conocen con la ayuda de los medios digitales. Pero, para la población en general, el Pontífice es una figura un tanto lejana. Por lo tanto, la venida del Papa a Asia no sólo emociona, sino que también despierta un renovado celo y sentido de la fe, porque demuestra que los pueblos asiáticos no están lejos de la mente y del corazón del Santo Padre.
–Hablamos de países muy diferentes: la opulencia de Singapur y la pobreza de Papúa Nueva Guinea, la Indonesia de mayoría musulmana y la mayoría católica de la antigua colonia portuguesa de Timor Oriental. ¿En qué medida la diversidad de los países asiáticos hace que esta visita sea especialmente significativa? ¿Qué es interesante destacar?
–La singularidad de Asia reside precisamente en su diversidad, en términos de culturas, religiones y tradiciones. Aunque los cristianos son minoría en la mayoría de los países asiáticos, con la excepción de Filipinas y Timor Oriental, vemos una fe creciente. Las Iglesias en Asia, aunque pequeñas, son vibrantes y vivas.
–Cardenal Charles Maung Bo, ¿qué puede aprender la Iglesia universal de la Iglesia de Asia?
–Me vienen a la mente tres palabras: paz y armonía, y luego lo que hace que la paz y la armonía sean una realidad, es decir, el diálogo. A pesar de los muchos retos a los que se enfrentan las Iglesias en Asia, nuestro objetivo es buscar la paz y la armonía. Todo el mundo las busca, y por eso, ante la opresión política, la pobreza, la devastación climática y muchas otras situaciones, la Iglesia debe trabajar con otros para restablecer la paz y la armonía en la vida de los directamente afectados.
–¿Qué puede decirnos, sin embargo, del testimonio de la Iglesia asiática?
–Las Iglesias en Asia son vivas y vibrantes. No hay más que ver que muchas de nuestras iglesias están llenas durante las misas dominicales. Se darán cuenta de que muchos de los asiáticos que emigran a otros países mantienen viva su fe. Son nuestros misioneros en estas antiguas Iglesias. Llevan una esperanza y un celo renovados a sus «nuevos hogares». También somos testigos de muchas Iglesias perseguidas en Asia.
–¿Qué hace falta en la Iglesia de Asia o en cada una de estas cuatro Iglesias que visitará el Papa?
–Me resulta difícil decir lo que necesita cada una de las Iglesias, pero rezo para que la visita del Santo Padre dé lugar a un renovado celo por la fe y a una mayor apertura de unos a otros para vivir en paz y cuidarnos mutuamente como hermanos, cada uno cuidando del otro independientemente de las diferencias que podamos tener.
–Finalmente, cardenal Charles Maung Bo, arzobispo de Yangón, Myanmar, ¿qué importancia cree que tendrá el tema del cuidado del clima y el medio ambiente, dado que esta parte del continente se ve cada vez más afectada por los desastres naturales causados por la crisis climática?
–Los efectos del cambio climático se están experimentando de forma devastadora en Asia. Dado que el tema del cuidado del clima está muy cerca del corazón del Santo Padre, estoy seguro de que abordará este tema. No podemos seguir siendo espectadores, sino que debemos implicarnos activamente en la promoción del cuidado del clima por el bien común de todos. La Iglesia en Asia también debe desempeñar un papel de liderazgo para lograr este cambio en la región y en el mundo.
Crédito de la nota: Vatican News