Conversión misionera, oración y caridad: estos son los elementos que han contribuido a la difusión del Evangelio en la historia de las Obras Misionales Pontificias (OMP). Así lo ha subrayado monseñor Roger Houngbedji, arzobispo de Cotonú, Benín, retomando los temas desarrollados por el papa Francisco en su carta dirigida a los directores de las OMP para la Asamblea General celebrada el pasado mes de mayo en Lyon con motivo de la misa de celebración del 200 aniversario de la fundación de la Obra Pontificia de la Propagación de la Fe y en acción de gracias por la beatificación de Paulina Jaricot.
La celebración, que tuvo lugar en el Centro Catequético de Ouidah, contó con la presencia del Director Nacional de las OMP, el padre Cosme Adjomale, una veintena de sacerdotes y, entre otros, una nutrida representación de profesores.
En su homilía, el arzobispo recordó cómo la beata Jaricot dejó una huella indeleble en su historia terrenal y ha invitado a los presentes a inspirarse en ella como modelo de vida cristiana.
El padre Cosme Adjomale, al término de la celebración eucarística en la que se ha enviado a 20 personas como misioneros, ha querido recordar la importancia del Año Jubilar de las OMP y de la figura de la beata Jaricot y, a continuación, se ha dirigido al Arzobispo haciendo dos peticiones concretas: «En nombre de las OMP de Benín, pedimos la introducción en los manuales de catequesis de la pastoral misionera en sus dimensiones de espiritualidad, animación, formación misionera, y la inscripción en un ‘libro de oro’ de los nombres de los valientes catequistas de nuestras diócesis, para perpetuar su memoria, o también podríamos nombrar salas dedicadas a la catequesis o encuentros con su nombre, como ya se hace en algunas parroquias».
Por último, el director nacional de la OMP de Benín ha lanzado un llamamiento a todas las diócesis del país para que redescubran la dimensión misionera en la oración, los sacrificios y los dones, y ha anunciado su intención de sensibilizar a la comunidad para crear grupos de jóvenes misioneros, familias misioneras y también de misioneros enfermos, que ofrezcan sus sufrimientos por la misión.
Crédito de la nota: Agencia Fides.
