La Conferencia Episcopal de Nigeria (CBCN) plantará 5,5 millones de árboles en los próximos cinco años para mitigar los efectos del cambio climático en el país.
La iniciativa titulada «Green Revolution Campaign», apoyada por Caritas Nigeria, ha sido presentada en Abuja, por el presidente de la CBCN, Mons. Lucius Ugorji, Arzobispo Metropolitano de Owerriha, quien ha dicho que más de 50 diócesis nigerianas plantarán al menos 20 mil árboles cada año.
Monseñor Ugorji también ha subrayado que el proyecto está orientado a salvar el medio ambiente amenazado por el cambio climático, que se manifiesta en forma de precipitaciones excesivas, subida del nivel del mar, inundaciones, graves sequías, y desertificación que afectan a 12 estados del norte de Nigeria y provocan pérdida de biodiversidad. Todos estos fenómenos desencadenan conflictos causados por la grave reducción de tierras agrícolas y pastos.
El director ejecutivo de Caritas Nigeria, el padre Uchechukwu Obodoechina, ha declarado que el proyecto de reforestación limitará las crisis entre agricultores y pastores y otros problemas relacionados con el cambio climático que afligen a humanos y animales.
El arzobispo Ugorji también ha abordado la cuestión de la gestión incorrecta de los residuos, describiéndola como una de las principales causas de la degradación del medio ambiente, un problema ejemplificado por las toneladas de materiales plásticos arrojados al entorno, que entre otras cosas son un peligro para la fauna íctica.
El Director General de la Agencia Nacional para la Gran Muralla Verde (NAGGW), el Dr. Yusuf Maina-Bukar, ha elogiado a la Conferencia Episcopal por la iniciativa, afirmando que podría ayudar a más de 40 millones de personas cuyos medios de subsistencia se ven amenazados por el cambio climático, y ha instado a «otras instituciones religiosas de todo el país a emular la acción, para garantizar un entorno propicio e inculcar una cultura de gestión sostenible del medio ambiente».
La NAGGW, que depende del Ministerio de Medio Ambiente, se creó en 2015 mediante una ley del Parlamento de Abuya, y está vinculada a la iniciativa de la Gran Muralla Verde en África, concebida en 2007 por la Unión Africana para hacer frente a la degradación de la tierra, aumentar la seguridad alimentaria y apoyar a las comunidades para que se adapten al cambio climático en el África subsahariana.
Crédito de la nota: Agencia Fides.