«Voces de Paz», la campaña de los jóvenes sudaneses

«Voces de Paz», la campaña de los jóvenes sudaneses

«Detener la guerra es una necesidad urgente para todo el pueblo sudanés»: con esta convicción, un grupo de jóvenes ha lanzado en Kampala (Uganda) la campaña «Voces de Paz», una iniciativa que busca implicar a las nuevas generaciones en la construcción de un proceso de paz duradero en Sudán, devastado por una guerra civil.

La campaña fue inaugurada el sábado 14 de junio por Sa’ad Mohamed, director ejecutivo del Centro Africano de Estudios sobre Justicia y Paz (ACJPS), y tiene como objetivo involucrar a los jóvenes sudaneses en la construcción de un proceso de paz sostenible.

«A través de esta campaña, pretendemos construir un proceso completo, que se centre en los jóvenes, aprovechando el poder y la influencia de las redes sociales para moldear la opinión pública», ha declarado uno de los jóvenes sudaneses presentes. El objetivo es utilizar tanto los medios digitales como las artes tradicionales para promover la reconciliación y poner fin al conflicto en curso en su patria, devastada por una cruenta guerra civil.

Según los organizadores, la iniciativa utilizará las plataformas digitales y las artes tradicionales, incluido el papel de las «Hakamat» (cantantes y narradoras tradicionales femeninas), para difundir mensajes de paz y convivencia, al tiempo que se supervisan y documentan las violaciones de los derechos humanos en todo Sudán.

También resalta que los grupos civiles y políticos sudaneses cuentan con una amplia experiencia en el uso de los medios digitales y las redes sociales, que desempeñaron un papel fundamental en la movilización de la Revolución sudanesa entre diciembre de 2018 y abril de 2019. Ante la represión mediática, las plataformas como Facebook, X y WhatsApp se convirtieron en herramientas esenciales para organizar protestas y coordinar acciones. De hecho, la revuelta rompió el bloqueo informativo oficial, convirtiendo las redes sociales en un instrumento de comunicación popular y unificando los lemas revolucionarios. Los activistas sudaneses obtuvieron apoyo internacional, especialmente en X (antes Twitter), que se transformó en un espacio de solidaridad global. Las plataformas digitales también se han vuelto vitales para que los jóvenes debatan sobre la construcción del Estado, la justicia transicional y los derechos humanos, promoviendo una cultura de resistencia digital.

Asjad Bahaa, fundadora y participante en la campaña, ha afirmado que «Voces de Paz» es la segunda fase de un proyecto del ACJPS iniciado en abril, centrado en la documentación de las desapariciones forzadas. Ha explicado también que la campaña formará a los jóvenes como observadores y documentadores de las violaciones de los derechos humanos, abordando el éxodo de muchos activistas debido a las amenazas a la seguridad.

Los jóvenes son «el combustible de la guerra y la paz» y, a menudo, son fácilmente reclutados por los grupos armados, subrayó un activista de la campaña. «Estamos tratando de invertir esta tendencia formando a los jóvenes para que sean promotores de la paz», ha afirmado.

La campaña es lanzada mientras el conflicto entre el ejército y las Fuerzas de Apoyo Rápido entra en su tercer año, con una escalada de violencia y pocos indicios de una solución política. Las condiciones humanitarias siguen empeorando y las violaciones de los derechos civiles son generalizadas.

Otros países también ofrecen ejemplos que ponen de relieve el potencial de las artes y los medios de comunicación en la construcción de la paz. Entre ellos, Ruanda, que tras el genocidio de 1994 utilizó las artes tradicionales, el teatro comunitario y las emisiones de radio para promover el amor, la reconciliación y el perdón. O Sierra Leona, donde, tras la guerra civil de 2002, grupos musicales juveniles itinerantes utilizaron la música tradicional para reintegrar a los niños soldado y promover la tolerancia. En Colombia, las campañas mediáticas que incorporaban las artes y la música tradicionales animaron a decenas de combatientes a deponer las armas y reintegrarse en la sociedad. En Níger, el papel de las «Hakamat» en la construcción de la paz se reforzó mediante canciones populares para transmitir de manera informal mensajes que instaban a poner fin a la violencia y promover la convivencia en las comunidades pastorales.

Crédito de la nota: Agencia Fides.