El cardenal arzobispo de Kinshasa, en la República Democrática del Congo, país visitado por el Papa en 2023, al denunciar el «colonialismo económico» esclavizante, subraya que el difunto Pontífice fue «una gran voz a favor de la justicia, de la paz en el mundo, de la promoción de los débiles».
Francisco fue un Papa cercano a África, como lo atestiguan sus visitas a 10 países africanos en 12 años de pontificado. Uno de sus viajes más memorables fue a la República Democrática del Congo, donde denunció el «colonialismo económico» esclavizador, haciendo resonar su llamado «manos fuera de la RDC y de África, que no es una mina para ser explotada».
En Kinshasa, la capital del país, el Papa fue recibido por el arzobispo, cardenal Fridolin Ambongo, quien fue su estrecho colaborador. Formó parte del C9, el Consejo de nueve cardenales encargado de ayudar al Papa en la reforma de la Curia Romana. Actualmente es presidente del SECAM, el Simposio de las Conferencias Episcopales de África y Madagascar. Tras el anuncio de la muerte del Papa, el prelado congoleño comparte estas reflexiones.
El papa Francisco regresó a la casa del Padre el lunes 21 de abril, lunes de la octava de Pascua. ¿Cómo recibió la noticia?
Un sentimiento de tristeza me invadió cuando supe esta noticia, sobre todo porque el día anterior, Domingo de Pascua, el mismo Papa había aparecido en la Plaza de San Pedro y había bendecido al pueblo, lo que nos había dado la esperanza de que estaba recuperando las fuerzas. Así que lo primero que siento es tristeza. Al mismo tiempo, estamos en la perspectiva de la Pascua, en la que Cristo murió y resucitó. Es también en esta esperanza de la resurrección que creo que está vivo nuestro querido papa Francisco. Descansa ya en la paz del Señor.
El Papa apareció el Domingo de Pascua, según recordó, e impartió la bendición Urbi et Orbi. En su mensaje, leído antes de la bendición, hizo fuertes llamamientos a la paz, especialmente en el Sahel, Sudán del Sur, Sudán, el Cuerno de África y en su propio país, la República Democrática del Congo. Como Presidente del SECAM, ¿cómo resuena en su opinión este mensaje?
Para nosotros en África, lo que dijo el Papa suena como su última voluntad, su testamento, antes de dejar este mundo. A lo largo de su pontificado, el papa Francisco ha sido una gran voz a favor de la justicia, la paz mundial y la promoción de los pequeños y los débiles. ¡Lo dijo el domingo y se fue el lunes! Para nosotros suena como un testamento que nos deja y que debemos seguir llevando adelante para el renacimiento de este continente que tanto sufre, para que la dignidad de los hombres y mujeres que hoy son víctimas de todo tipo de violencia, de todo tipo de injusticia, gane un poco más de dignidad, como siempre deseó Francisco.
Eminencia, como miembro del C9 usted fue uno de los colaboradores más cercanos del papa Francisco. ¿Qué quedará de las muchas innovaciones que introdujo?
Francisco quedará en la historia como el Papa de la reforma. Ha hecho mucho para reformar la Iglesia, y esto debe continuar, y creo que continuará, por la sencilla razón de que antes de partir concluyó el ciclo del Sínodo sobre la sinodalidad. Y lo que ha producido este Sínodo se ha convertido en patrimonio para toda la Iglesia. Aunque el papa Francisco ya no esté, este es el legado que nos deja y está en nosotros poner en práctica lo que él siempre quiso. Estoy convencido de que la reforma continuará.
Como presidente del SECAM, ¿qué legado cree usted que deja el Papa Bergoglio a África?
Para el continente africano, es esencialmente la promoción del valor y la dignidad de la persona humana. Como sabéis, si hay una parte del mundo donde los seres humanos sufren, es sin duda aquí, en África. Recordamos todavía el último viaje apostólico que realizó a la República Democrática del Congo, a Kinshasa, con las fuertes y proféticas palabras que pronunció y que resuenan no sólo en los oídos de los congoleños, sino en todo el continente africano y en el mundo entero. Creo que para nosotros el legado que nos deja el Papa es precisamente esta lucha que debemos seguir librando en nombre del Evangelio, en nombre del amor mutuo, para que todos los africanos puedan vivir con dignidad.
Francisco visitó su país, la República Democrática del Congo, en 2023. Este viaje quedó grabado en la memoria, con fuertes llamamientos, especialmente contra la explotación y la colonización económica. ¿Cómo resuenan todavía hoy estos llamamientos?
El propio Pontífice consideró el viaje al Congo como una de sus visitas apostólicas más importantes. Le impresionó la acogida, el entusiasmo de la gente, su presencia que inspiraba tanta esperanza. Ya saben que hoy en día el pueblo congoleño sigue sufriendo. En este contexto, la visita del Papa fue como un paréntesis en el que el pueblo vivió, experimentó un momento de felicidad, un momento de beatitud, un momento de comunión entre congoleños, un momento de comunión entre el pueblo y su Dios. Esto quedará en la historia.
En este momento de duelo por la muerte de Francisco, ¿qué llamamiento dirige a los fieles cristianos?
Todos estamos conmocionados por esta triste noticia, pero con esperanza creemos que el Papa ya está en la casa del Padre. Pido simplemente al pueblo de Dios que siga apoyándolo con la oración y mantenga una actitud de recogimiento en este período de dolor.
Crédito de la nota: Vatican News.