La tregua de 72 horas establecida el 21 de abril entre las Fuerzas Armadas Sudanesas (FAS) y los paramilitares de las Fuerzas de Apoyo Rápido (Rapid Support Forces – RSF) con motivo del final del Ramadán debería expirar esta noche, 27 de abril. Sin embargo, los combates no han cesado en varias zonas del país.
Según el Ministerio de Sanidad, los muertos registrados en estas dos semanas de guerra de guerrillas, avanzada con artillería pesada y bombardeos aéreos, serían más de 500 y los heridos más de 4 mil.
La prensa local informa que el presidente de Sudán del Sur y miembro de la Comisión de la Autoridad Intergubernamental para el Desarrollo en el Cuerno de África (IGAD), Salva Kiir Mayardit, ha anunciado que las dos partes acordarán prorrogar la tregua otras 72 horas, y que dos delegados del ejército y de las RSF discutirán en Juba una posible tregua permanente. El ejército ha emitido un comunicado en el que afirma aceptar la propuesta, pero descarta una reunión cara a cara entre Burhan y Hemedti, jefes respectivamente de las FAS y las RSF.
Continúa la evacuación de civiles, extranjeros y sudaneses a los países vecinos. Más de 10 mil personas han cruzado al norte de Egipto desde Sudán en los últimos cinco días, según las autoridades de El Cairo. Se calcula que 20 mil han entrado en Chad por rutas que conducen más al oeste. En Jeddah, Arabia Saudí, ha llegado un barco procedente de Port Sudan con unas 4 mil personas de distintas nacionalidades.
Uno de los problemas críticos es la fuga de presos de las cárceles. Según los expertos, se han fugado 20 mil presos, entre ellos muchos delincuentes peligrosos y altos dirigentes del antiguo régimen dictatorial. Además, las organizaciones humanitarias han suspendido las operaciones de ayuda a raíz de los enfrentamientos, que han provocado bombardeos y tiroteos sin precedentes en la capital, donde viven más de cinco millones de habitantes, y graves disturbios en la región occidental de Darfur.
Los misioneros al lado de la población
«Un tercio de la población del país, de 46 millones de habitantes, necesita realmente ayuda humanitaria», explicó a Radio Vaticana y Vatican News el padre Filippo Ivardi, misionero comboniano y experto en África.
Los misioneros salesianos y combonianos han decidido apoyar a la población. «Para nosotros, combonianos, Sudán es la tierra de Daniel Comboni, donde nuestro fundador dio su vida precisamente por amor a ese pueblo. La fidelidad en estos momentos nos pide que nos quedemos», continúa el padre Ivardi.
Algunos médicos de Médicos Sin Fronteras y de Emergency también han permanecido en el país africano para intentar hacer frente al colapso del sistema sanitario. «Procuramos permanecer -concluye el misionero- con el gesto profético y simbólico de permanecer al lado de los que sufren sin marcharnos».
Crédito de la nota: Agencia Fides y Vatican News.